Domo
Cotopaxi, Ecuador
Tipo: Oficinas
Cliente: Privado
Tamaño: 1500 m2
Estado: Concurso Privado
El edificio se muestra como una prolongación de la orografía del terreno, como un elemento que sutilmente se eleva, mimetizándose con el paisaje andino como si de un elemento natural se tratara, como un volcán. Es la importancia del entorno y su ubicación la que hacen que el edificio sea una pieza que se integre perfectamente con él.
Su composición volumétrica es sutil, se posa sobre el terreno de forma delicada elevándose sobre un podio. Su forma ovalada responde a un concepto de diseño circular que se extrapola no solo en una forma, sino que va más allá, este va de la mano de la arquitectura circular, que, apuesta por la reutilización de los recursos, el diseño flexible y la inclusión de estrategias de eficiencia energética.
Tiene un núcleo central abierto donde la naturaleza se introduce en el edificio y ese centro se integra con el edificio, permitiendo que las personas estén vinculadas con la vegetación a ambos lados de sus espacios de trabajo.
Su forma también tiene incidencia en la distribución funcionalidad programática, esta cumple un rol fundamental en el diseño contemporáneo de oficinas y lugares para el trabajo. En este sentido, el estudio de la planta de arquitectura evidencia una interesante forma de aproximación; no solo permite abordar una adecuada logística y circulación, sino encontrar variaciones e innovaciones eficientes que posibilitará mejores espacios de trabajos que se adapten a las necesidades del usuario, esta hace que los distintos tipos de áreas se relacionen de una manera más fluida y los distintos equipos puedan interactuar entre ellos.
El proyecto de oficinas Visandes tiene una propuesta de sostenibilidad sólida, con el objetivo final de ofrecer espacios con niveles adecuados de iluminación y ventilación, acorde a normas internacionales y locales. También se espera obtener reducciones importantes en el consumo de energía y de agua.
Se tendrán temperaturas internas confortables todo el año, gracias a las estrategias de confort térmico, que permitirán evitar el uso de equipos de climatización. La orientación del edificio permite reducir las ganancias excesivas de calor solar, al ubicar las fachadas más largas en dirección Norte y Sur, lo que permite tener ingreso de radiación controlado, ideal para el clima templado del lugar.
La configuración del edificio con plantas alargadas y de espesor reducido, permite que la luz natural bañe todos los espacios interiores, reduciendo la necesidad de iluminación artificial durante el día. Esta configuración de planta angosta, permite, además, potenciar la ventilación natural cruzada para garantizar buenos niveles de calidad del aire interior, y permite remover el exceso de calor en días cálidos.
Las celosías en fachadas cumplen además la función de tamizar la luz natural directa, para evitar el disconfort visual por deslumbramiento, y además permite reducir las ganancias de calor solar.
El proyecto contempla introducir un sistema de recolección de agua lluvia, la cual será filtrada y tratada para reutilizar en todos los inodoros y riego. La combinación de estas estrategias supone un ahorro de agua de hasta el 50%.